La fosa de las
Marianas es el lugar conocido más profundo de la corteza terrestre, de allí su
fama mundial. Se originó en un proceso de subducción. Está localizada en el fondo del Pacífico
noroccidental, al sureste de las islas Marianas, cerca de Guam.
Su punto más profundo
es llamado abismo Challenger con 11.034 m de profundidad. La
fosa tiene una longitud de 2.550 km
y una anchura media de 70
kilómetros. La presión
en el fondo de la fosa es de 108.600 kPa (unas 1072 atm), 1000 veces mayor que la de la Tierra.
Paralela a la fosa corre un cinturón de islas que da origen al archipiélago de
islas Marianas, muchas de esas islas son de origen volcánico.
Fue descubierta por
la expedición británica con el navío HMS Challenger (diciembre 1872- mayo
1876), de quién se tomó el nombre para la parte más profunda de la fosa. Su
misión era cartografiar por primera vez el suelo oceánico. Durante los cuatro
años que duró la expedición, se recorrió 11.000 km. La tripulación sondeaba
las profundidades cada 225 km
usando 400 km de
cuerda con pesos de plomo. Cuando se midió la profundidad a 320 km de la isla de Guam, se
sondeó una profundidad de 8 km.
En 1951 la fosa fue
explorada por el navío de la Armada Real Británica HMS
Challenger (llamado así por el barco de la expedición original) y
usando un sónar, la máxima profundida medida fue de 11.012 m.
En 1957, la nave
soviética Vityaz informó de una
profundidad de 10.934 metros.
Pero no fue sino
hasta el 23 de enero de 1960,
cuando se descendió por primera vez usando un batiscafo mediante el cual se
evitaban los efectos de la gran presión a tales profundidades. Se llamaba
Trieste y fue creado por Auguste Piccard en 1953 y capitaneado por su hijo
Jacques Piccard y por Don Walsh. El lugar del descenso fue el extremo
suroccidental de la fosa, a unos 338 km
de Guam. Los sistemas de a bordo indicaban una profundidad de 11.521 m, que después fue revisada y
resultó ser de 11.034 metros.
Durante los años 50 y
60, un equipo de geólogos liderados por Harry Hammon Hess recogieron datos de
todos los fondos oceánicos del mundo con un sónar y sus mapas revelaron que la
fosa de las Marianas solo es una pequeña parte de una red de gigantescos
cañones submarinos que se extienden por toda la Tierra; además corriendo en
paralelo a la fosa, en el otro lado del Pacífico, se descubrió la dorsal del
Pacífico oriental. Los geólogos querían saber si existía alguna relación entre
la fosa y la dorsal. Se supo, durante la Guerra Fría, que los terremotos se
producían cerca de las dorsales y las fosas oceánicas. Se descubrió que la
corteza terrestre estaba dividida en placas tectónicas, que las fosas marinas
se crean en los bordes de estas placas, y que la corteza creada de la dorsal
oceánica es devorada por algo en algún lugar del Pacífico (posiblemente por la
fosa de las Marianas). Los científicos se dieron cuenta que el archipiélago de
las Marianas es un reflejo exacto de la forma de la fosa. Se pensaba que la
fosa formó los volcanes mediante un proceso llamado subducción que sucede
cuando chocan dos placas tectónicas y al colisionar, la placa más pesada, entra
debajo de la más ligera bajando hacia el manto y arrastrando con ella
sedimentos y agua formados durante millones de años.
El proceso de subducción crea
la fosa cuando la placa pesada baja y crea un hueco en el manto, las placas
forman el pliegue gigante que es la fosa. Las zonas de subducción son los
lugares donde se producen los terremotos más fuertes pero en la fosa de las
Marianas no ocurren; esto se explica a que en esa zona hay una roca blanda
llamada serpentina y las placas, al chocar, destrozan esta roca blanda para
formar un material lubricante que es el lodo y que evita los grandes
terremotos. Los científicos han descubierto que la fosa de las Marianas es la más
profunda del mundo porque su corteza es la más antigua y pesada.
Además, se sabe que
la profundidad de las fosa es extremadamente fría pero posee ventilaciones
hidrotermales gracias a la difusión de las placas tectónicas que emiten sulfuro
de hidrógeno y diversos minerales, que a su vez, forman parte de la cadena
alimenticia de las especies que habitan allí. Estas especies fueron halladas
por científicos, una fue un calamar gigante del género Architeuthis. También,
los exploradores japoneses, sumergidos en su submarino a control remoto llamado
Kaiko, descubrieron más de 200 formas de vida unicelulares como plancton y
bacterias ubicadas a 1089 metros
de profundidad. Se estima que los organismos descubiertos tienen una formación
de 6 millones de años de antigüedad, lo que hace creer que se trata de restos
de la vida prehistórica del planeta.
Hace pocos días, el
director de cine (Titanic, Avatar) James Cameron, descendió hasta las
profundidades de la fosa mediante el submarino Deapsea Challenger (el segundo
en tocar fondo después del batiscafo Trieste), convirtiéndose en la primera
persona en bajar en solitario. A causa de la presión, el submarino de una plaza
se comprimió 8 cm
durante las 3 horas que paso en el fondo. Además de este tiempo, requirió 2
horas y media en bajar, y 1 hora en subir.
esta entrada me ha gustado mucho, bien documentada, con fotos, vídeos , muy bien elaborada. lástima que el tema no sea demasiado interesante. Nota : 9
ResponderEliminarMe ha gustado, me ha serbido para el trabajo de clase muchisimo!!! :)
ResponderEliminarLa fosa de las Marianas es la más profunda fosa oceánica conocida y el lugar más profundo de la corteza terrestre. Tiene su origen en un proceso de subducción. Se localiza en el fondo del Pacífico noroccidental, al sureste de las islas Marianas, cerca de Guam.
ResponderEliminarLa fosa tiene una longitud de 2.550 km y una anchura media de 70 kilómetros. La presión en el fondo de la fosa es de unas 1072 atm. Paralela a la fosa corre un cinturón de islas que da origen al archipiélago de islas Marianas, muchas de esas islas son de origen volcánico. Su punto más profundo es llamado abismo Challenger con 11.034 m de profundidad y una presión de 110.000 kPa.2
En la fosa se encontró un calamar gigante del género Architeuthis, una especie desconocida de lenguado y varias especies desconocidas hasta entonces. A 11 km de profundidad se encontraron otros tipos de biodiversidad como minúsculos seres vivos unicelulares y una forma de plancton por ahora desconocida, según se publicó en la revista Science. La fosa de las Marianas es uno de los lugares más enigmáticos de la Tierra.
Un equipo internacional de investigadores ha anunciado los primeros resultados científicos del análisis de muestras de uno de los lugares más inaccesibles de la Tierra: el fondo de la Fosa de las Marianas, ubicado a casi 11 kilómetros por debajo del nivel del mar en el Pacífico occidental. El fondo de esa fosa es el sitio más profundo de la Tierra explorado por el Ser Humano.
Su análisis documenta que existe una comunidad de bacterias muy activa en el conjunto de sedimentos de la fosa, a pesar de que el ambiente se encuentra bajo una presión extrema, casi 1.100 veces mayor que la reinante en la superficie del mar.
De hecho, los sedimentos contienen casi 10 veces más bacterias que los sedimentos de la llanura circundante ubicada a una menor profundidad, concretamente a entre unos 5 y 6kilómetros.¿Porqué?
El motivo parece ser que las fosas abisales actúan como focos de actividad microbiana porque reciben un flujo inusualmente alto de materia orgánica, compuesta por animales muertos, algas y otros microbios, procedente de zonas cercanas y menos profundas. Es probable que parte de este material provenga de estratos superiores del fondo marino, y que se desprenda y caiga al abismo durante los terremotos, que son comunes en la zona. De ese modo, aunque las fosas abisales, como la Fosa de las Marianas, representan sólo una minúscula parte del fondo oceánico del planeta, tienen un papel relativamente grande en el balance del carbono marino y, por ende, en el ciclo global del carbono.
El equipo del profesor Ronnie Glud de la Universidad del Sur de Dinamarca, y especialistas de otras instituciones en Dinamarca, Alemania, Japón y Escocia, se valieron para su investigación sobre la Fosa de las Marianas de un robot submarino que mide casi 4 metros de altura y pesa 600 kilogramos. Entre otras cosas, el robot está equipado con sensores ultrafinos que se insertan suavemente en el fondo del mar para medir la distribución de oxígeno con una alta resolución espacial.
Las imágenes captadas en el fondo de la Fosa de las Marianas, confirman que hay muy pocos animales grandes a esas profundidades. El fondo del abismo es un mundo dominado por los microbios que están adaptados a funcionar con eficacia sometidos a condiciones que resultan muy inhóspitas para la mayoría de los organismos superiores.