martes, 27 de diciembre de 2011

MAMÍFEROS QUE PONEN HUEVOS: EQUIDNAS Y ORNITORRINCOS

El otro día en clase de 1º bachillerato cuando clasificábamos a los mamíferos , vimos el orden monotremas y dentro de este orden mencionamos los ornitorrincos y las equidnas y alguien pregunto que era una equidna , a lo que yo no supe responder bien. Borja Hernández nos ha mandado esta aportación para responder a esa pregunta. Muchas gracias

Los equidnas deben su nombre a la ninfa mitológica madre de todos los legendarios monstruos de la Grecia Clásica.


Son animales con un hocico alargado en forma de pico, sin dientes, y con una lengua alargada y retráctil. El cuerpo, de unos 30 a 90 centímetros, según la especie, está cubierto por una mezcla de dos tipos de pelos, siendo uno de ellos más largo y rígido, a modo de espinas. Son, junto con los ornitorrincos los únicos mamíferos que ponen huevos.
Se encuentran en Nueva Guinea, Tasmania y Australia.
 
El cráneo es largo y redondeado, la cara larga con la mandíbula inferior poco desarrollada, constituida por dos delgados y largos huesos. Su dieta, constituida por insectos y lombrices, determina un aparato bucal tubular de estrecha abertura, provisto de una larga lengua pegajosa que puede alcanzar los 20 centímetros de longitud, con la que atrapan el alimento, que, al carecer de dientes, será triturado con unas espinas córneas situadas en el paladar al final de la boca. Para localizar los alimentos, además de un agudizado sentido del olfato, están dotados de electrorreceptores táctiles en el rostro con los que les resulta fácil hallar las colonias de hormigas y termitas.


Son poderosos excavadores que emplean pies y manos para construir galerías y oquedades o escarbar en la tierra en busca de alimento. Para ello las extremidades poseen manos y pies cavadores dotados de poderosas uñas retráctiles. El segundo dedo de las extremidades posteriores es más largo y lo emplean para rascarse y limpiarse el pelo y la pie

Sólo tienen un orificio corporal para los aparatos urinarios, reproductivo y digestivo (común a los monotremas).

La hembra pone un solo huevo de cáscara blanda y coriácea 22 días después del apareamiento y lo deposita directamente en su bolsa. La incubación tarda diez días; el equidna joven succiona la leche de los poros de las dos glándulas mamarias (los monotremas no tienen pezones) y permanecen en la bolsa durante cuarenta y cinco a cincuenta días, en dicho tiempo comienzan a desarrollar las espinas. La madre cava una madriguera y deposita al pequeño, retornando cada cinco días para amamantarlo hasta el destete, que es a los siete meses.

 El ornitorrinco
Residente en los lagos y ríos de Tasmania y Australia el ornitorrinco parece un animal al que la naturaleza armó con lo que le quedaba. Pero, estudiado a fondo, es un ser formidable. Es un animal excavador, construye, en la costa de los ríos, una madriguera que consta de una larga galería que se abre por encima y por debajo del nivel del agua y termina en una cámara bastante espaciosa tapizada de hierbas secas. En esta cámara es donde la hembra pone sus dos huevos que son blandos y compresibles. Al nacer las crías inmediatamente se introducen en un pliegue de la piel, especie de rudimento de bolsa marsupial donde se vierte la secreción láctica. Para hacer todo aún más confuso, los ornitorrincos poseen dientes de "leche" que pierden con la edad.
 
Su pico de pato, recubierto por una fina piel, es un elemento increíblemente útil para buscar alimento en el fondo fangoso de los ríos donde los ornitorrincos se alimentan de gusanos, larvas de insectos, camarones de agua dulce, caracoles inmaduros y pequeños peces y ranas. Una vez que se ha sumergido bajo el agua sus ojos, orejas y fosas nasales se cierran por lo que nada sin ver. Es ahí donde se pone en juego el aspecto más fantástico de este animal.
 
El pico de los ornitorrincos posee electrorreceptores tan sensibles que pueden percibir el campo eléctrico generado por el ligero movimiento de la cola de un camarón a veinte centímetros de distancia. Sin duda alguna, un cazador extremadamente eficaz que aún hoy en día nos sigue sorprendiendo. 
 Es uno de los pocos mamíferos venenosos; los machos tienen un espolón en las patas posteriores que libera un veneno capaz de producir un dolor intenso a los humanos.
Finalmente un vídeo:
 

1 comentario: