miércoles, 12 de enero de 2011

LAS CINCO GRANDES EXTINCIONES

Aportación de Lorena Onrubia de 4º ESO

 A finales del Ordovícico (hace unos 440 millones de años): un enfriamiento global repentino pudo ser la causa de esta primera gran extinción en la historia de la Tierra. El 25% de las familias de seres vivos desaparecieron, la mayoría de ellas marinas, ya que en aquella época no había casi especies terrestres. También se la conoce como "La extinción del Cámbrico/Ordovícico". Esta comprobado que esta extinción se dividió en cuatro fases. Esta extinción causó la desaparición de los trilobites (artrópodos con un duro exoesqueleto) y los arqueociátidos. 


A finales del Devoniano (hace unos 370 millones de años): tampoco se conoce el origen exacto de esta segunda gran extinción, en la que desapareció el 19% de todas las familias de seres vivos. Es considerada la "Edad de los peces". Las causas de esta gran extinción se atribuyen a unos impactos de meteoritos, a la disminución de la temperatura global, reducción del dióxido de carbono y a la ausencia de oxígeno. De las setenta familias de peces que había, solo diecisiete sobrevivieron. Algunas de las especies que se extinguieron, fueron: los amonoides (moluscos cefalópodos), los braquiópodes (animales que tenían un cuerpo formado por dos valvas y que alcanzaban los 30 cm de largo),

A finales del Pérmico (hace unos 250 millones de años): en esta tercera gran extinción, el 95% de las especies de seres vivos desaparecieron (una familia puede abarcar entre unas pocas de especies). También se le llama La Gran Mortandad, y todavía no se sabe con exactitud que fue lo que la provocó. Algunas personas piensan que fue un asteroide gigante, mucho más grande, que el que años antes casi acaba con los dinosaurios. Los que apoyan esta hipótesis, aseguran que el Cráter de la Tierra de Wilkes, (un gigantesco cráter de origen meteórico encontrado bajo la capa de hielo de la Antártida) es la evidencia de que se produjo un impacto cometario en esas fechas. Otros piensan que fue producida por la actividad volcánica producida por el movimiento de las placas tectónicas, al chocarse todas formando la Pangea. También se piensa que pudo haber un periodo de calentamiento global. E incluso hay personas que tienen la hipótesis de que de que todas estas circunstancias podrían haber ido encadenadas en un corto periodo de tiempo y que todas provocaron el que no pudiera haber vida en el planeta. Esta última hipótesis se conoce como El Asesinato del Orient Express. Nosotros somos los descendientes de ese 5% de especies que sobrevivió a esta gran extinción.

A finales del Triásico (hace unos 210 millones de años): gracias a esta cuarta extinción masiva, animales como los dinosaurios pudieron extenderse en la Tierra. Las causas precisas todavía se desconocen. El nombre de Triásico, es por tri-, por las tres capas de roca que se depositaron durante el periodo en la Tierra. Al no quedar casi especies, el principio de este periodo fue una época de cambios. Algunos reptiles mamiferoides sobrevivieron a la gran extinción del Pérmico, y los cinodontos, el grupo más desarollado de estos reptiles, dieron origen a los mamíferos. Estos mamíferos eran pequeños animales parecidos a las musarañas. Al final de éste periodo hubo una extinción masiva, pero más pequeña que las anteriores y que acabó definitivamente con los reptiles mamiferoides (reptiles parecidos a los mamíferos. Había de muchos tipos diferentes), los tecodontos (generalmente eran pequeños y ágiles, con los dientes implantados en alvéolos. Originaron algunas especies de dinosaurios y había muchos tipos diferentes de tecodontos), y los rincosaurios (Tenían un pico curvado, una lengua muy larga, varias cadenas de dientes planos y medían desde un metro a dos metros y medio, pero no todos eran así, había también algunos con la cabeza en forma de pico y cuya longitud era como la de la mano extendida de un adulto y que medía 20 cm de largo). Durante éste periodo, el clima se hizo más seco, por lo que las plantas también evolucionaron para adaptarse al medio. Las causas de esta extinción se desconocen, ya que hay muchas hipótesis, pero ninguna termina de "encajar" con todo lo que ocurrió.

A finales del Cretácico (hace unos 65 millones de años): es la más reciente y famosa, ya que supuso la extinción de los dinosaurios, que habitaron el planeta durante más de 150 millones de años.También supuso la desaparición repentina de otras muchas especies, como los amonites marinos (animales protegidos por una concha única, enrollada en una espiral.), los belemnites(eran moluscos cefalópodos emparentados con la sepia.
 Se apunta al impacto de un cometa de grandes dimensiones en la península de Yucatán como posible detonante. No obstante, también podría estar involucrada una gran erupción volcánica en el territorio de la actual India. El 70% de las especies conocidas desaparecieron.  

3 comentarios:

  1. No sabia que habían cinco grandes extinciones, lo que mas me sorprende es que han desaparecido tantas especies, sobre todo en la extinción de finales del Pérmico en la que desaparecieron el 95%, pero aun así sigue habiendo tantas especie. pero aún así me ha gustado saber lo que ha pasado hace millones de años.

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  2. Por qué sobrevivieron los mamíferos a la gran extinción del Cretácico?




    Hace 65 millones de años, en la frontera entre los periodos Cretácico y Terciario, un asteroide de diez km de diámetro chocó contra nuestro mundo provocando uno de los peores episodios de extinción de todos los tiempos. Más del 70% de las especies que poblaban entonces la Tierra (tanto marinas como terrestres) desaparecieron por completo, casi de repente. Entre ellas los dinosaurios, que terminaron así, de golpe, un reinado de más de 200 millones de años. Sin embargo, algunos lograron sobrevivir a la catástrofe y heredaron un mundo nuevo y libre del dominio de los lagartos gigantes. ¿Cómo lo consiguieron?

    Para muchos expertos, las madrigueras subterráneas y los entornos acuáticos donde los primeros mamíferos se ocultaban de los dinosaurios consiguieron también protegerles del breve, pero drástico, aumento de las temperaturas. Algo que sus enormes vecinos, igual que la gran mayoría de las criaturas de la superficie, no pudieron hacer. Un gran número de ellos, en efecto, murió quemado sin remedio en las primeras horas que siguieron a la caída del meteorito.

    Tras varios días de un calor extraordinario, la temperatura superficial de la Tierra descendió hasta niveles compatibles con la vida, y los pequeños mamíferos pudieron empezar a salir de sus madrigueras, para encontrarse con un mundo devastado y completamente distinto del que habían conocido hasta entonces. Devastado, sí, pero del que aún era posible obtener alimento, siempre que se tuviera una dieta adecuada.

    «Incluso si algunos de los grandes dinosaurios herbívoros se las arreglaron para sobrevivir a la destrucción inicial, se encontraron con que, literalmente, no tenían nada qué comer –asegura el científico Graham- ya que la mayor parte de la vegetación superficial también quedó destruida». Y a medida que los herbívoros supervivientes fueron desapareciendo, también lo hizo el principal sustento de los grandes carnívoros que se alimentaban de ellos.

    Los mamíferos, por el contrario, podían comer insectos y plantas acuáticas, que seguían siendo relativamente abundantes tras el impacto del meteorito. Así que, a medida que los dinosaurios supervivientes fueron a su vez desapareciendo, los mamíferos empezaron a florecer. Lo mismo sucedió con los representantes de otras clases de animales (como por ejemplo los cocodrilos), pero fueron precisamente los mamíferos los mayores beneficiarios de la nueva situación.


    De hecho, fue entonces cuando empezaron un proceso de diversificación que les ha llevado a poblar prácticamente todos los rincones del planeta con una infinidad de especies, entre ellas la nuestra. Resulta irónico, pero es más que probable que sin la caída de ese meteorito devastador, nunca se habrían dado las condiciones para el surgimiento de nuestra propia especie.

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  3. Durante los últimos 550 millones de años se han producido cinco extinciones masivas que acabaron con gran parte de la vida en la Tierra. La sexta se está produciendo en la actualidad según diversos expertos que denuncian la velocidad a la que desaparecen las especies. Un acto provocado por los seres humanos. Y aunque el Homo sapiens domine en estos momentos el planeta, en un escenario de extinción masiva no se garantiza su futuro: sus consecuencias son impredecibles, según un estudio publicado en Science.
    Las grandes extinciones en masa producen cambios tan drásticos en la Tierra que afectan incluso a los mecanismos de la evolución. Así lo sugiere un reciente estudio publicado en la revista Science. Su responsable, el paleobiólogo John Alroy, de la Universidad Macquarie en Sydney (Australia), asegura que tras una extinción masiva no se puede predecir cómo quedará la biodiversidad posterior. La situación de las especies en el pasado no sirve para saber cómo será su futuro.
    Este trabajo choca con las hipótesis de paleontólogos como Jack Sepkoski, que fuera profesor del propio Alroy y el primero que, en la década de 1980, señaló que la Tierra ha experimentado cinco grandes extinciones masivas en los últimos 550 millones de años, en los que la vida ha dejado registro fósil. Según estos expertos, si se mira la proporción en la que cada grupo produce nuevas especies, se podría predecir a los ganadores y perdedores tras un fenómeno de desaparición extrema.
    Algunos biólogos de la evolución han pensado también que la vida podría recuperar su composición presente con el tiempo y las condiciones suficientes. Pero esto no ha sido así, señala Alroy. Para realizar esta afirmación, este investigador ha utilizado un método estadístico a partir de la base de datos Paleobiology, que recopila los registros de casi 100.000 colecciones fósiles de todo el mundo.
    No obstante, el paleontólogo Charles Marshall, de la Universidad de California en Berkeley, recuerda en un comentario anexo al artículo de Science que la comunidad científica tiene que revisar el método estadístico de Alroy y que la base de datos Paleobiology podría estar incompleta.

    El debate sobre las extinciones masivas sigue con varios interrogantes. Uno de ellos pasa por saber si se puede predecir cuándo se producirán o si las especies tienen fecha de caducidad. El registro fósil sugiere que cada 26-30 millones de años se produce una desaparición catastrófica. Algunos microorganismos pueden sobrevivir unos diez millones de años, mientras que los mamíferos tienen una media de un millón de años.
    Las causas de las extinciones masivas son diversas, si bien en todas ellas siempre hay un cambio climático producido por factores anteriores: movimientos de placas tectónicas, sismos, alteración de las corrientes marinas, impactos de grandes meteoritos, etc.

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